La regeneración celular o terapia de regeneración celular es un tratamiento que se especializa en la renovación de células dañadas, disfuncionales o inactivadas, ya sea por enfermedad o por el proceso de envejecimiento.
Dicho en otros términos, según la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), la terapia celular consiste en la administración de células somáticas vivas (CÉLULAS QUE CONFORMAN EL CRECIMIENTO DE LOS TEJIDOS) a humanos, con el fin de prevenir o tratar una enfermedad.
¿Para qué sirve la terapia celular?
- Sirve para el rejuvenecimiento y antienvejecimiento: la terapia con células madre permite la formación de nuevo colágeno y elastina, aportando volumen a la zona y rejuveneciendo la piel.
- También es muy útil para la osteoartritis: la enfermedad puede afectar cualquier articulación del cuerpo. El tratamiento con células madre mesenquimales permite la regeneración del cartílago dañado, lo que reduce el dolor y la inflamación.
- Patologías de la piel: algunos ejemplos de estas patologías pueden ser úlceras, heridas que no cicatrizan o fístulas. La terapia de restablecimiento celular es la solución a este problema clínico común.
- Alopecia: a través de la formación de nuevos vasos sanguíneos y folículos pilosos, es posible promover el crecimiento del cabello, fortalecerlo y aumentar su densidad.
- Traumatología: por ejemplo, aplicar terapia de restablecimiento celular para la reparación articular que puede acelerar el proceso de recuperación de lesiones deportivas.
La terapia celular requiere un enfoque multidisciplinario desde la inmunología hasta la biología celular, y su éxito depende de la comprensión de la complejidad de las interacciones entre las células individuales y los organismos huéspedes. Siendo este un tratamiento que consiste en adquirir células madre y reintroducirlas en un paciente con el objetivo de mejorar la capacidad del organismo para regenerar células dañadas o enfermas.
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